martes, 29 de noviembre de 2011

Introducción al Gestaltdrama (junio 2011)

GESTALT DRAMA (Junio 2011)
Transcripción realizada por Sarala a la Introducción de la sesión del Seminario Avanzado de junio del 2011.

Es un método ideado por mí y su propósito es que el grupo represente, el mundo y el proceso  interno de un participante.
En un psicodrama lo que hacemos es representar las interacciones de un participante, la situación social, familiar o existencial en que él se desenvuelve a través de situaciones que el mismo ha narrado.

En cambio en el gestaltdrama hacemos abstracción de todo lo que es interactivo hacia el entorno de la persona y nos centramos en intentar descifrar el mundo interno de una persona e hipotéticamente representárselo y en la medida que esa hipótesis es adecuada es extremadamente removedor y positivo, ya que estamos mostrando visual y auditivamente lo que yo soy por dentro.
Para llegar al gestaltdrama hay que cubrir varias etapas.

1° etapa:             Acompañamiento individual en grupo.
                Durante el acompañamiento, una retroalimentadora toma notas de los momentos del participante, es decir, de los hitos porque pasa su proceso; una segunda retroalimentadora anota los temas centrales, hábitos del proceso y hábitos históricos e hipotéticas creencias ocultas, inmanentes o inconscientes. De haber más retroalimentadoras pueden observar su relación de coherencia entre su lenguaje verbal y no-verbal, sus rasgos caracterológicos e, incluso, sus manifestaciones arquetípicas.
2° etapa:             Análisis de los momentos del participante y demás aspectos observados.

3° etapa:             Empatía con el proceso del participante.
                               El grupo realiza dos tareas: 1) se pone en el lugar del participante y empatiza con él y su proceso.

                                                                                    2) asume el proceso como propio y lo observa como suceso personal.
4° etapa:             Construcción del Gestaltdrama:

                               El grupo elabora y construye el gestaltdrama ideando su posible representación. Si es posible incluye la reparación.
5° etapa:             Representación del Gestaltdrama.

a)            El grupo representa el gestaltdrama para el participante.
b)           Lo reconstruye a indicación del participante, e

c)            Incorpora en la representación al participante de modo que pase por todos sus personajes internos, hasta llegar a su personaje nuclear.
6° etapa:             Significación y sentido.

                               Tanto el participante como cada miembro del grupo exponen el sentido y significado personal que ha tenido el gestaltdrama y sus conclusiones.
Se necesita una recopilación importante de  información del participante. Una persona hace una silla caliente, un trabajo individual en grupo, el grupo toma nota de aspectos claves y después empieza meterse en el mundo interno y luego a construir la representación.

Para construir el gestalt drama el grupo retroalimentador debe meterse en su mundo interno.

El gestalt drama es tan eficaz y positivo para el cambio y transformación del participante como del grupo, porque el grupo realmente vive un proceso muy potente haciendo esta indagación dentro de sí mismo y además en interacción con otras personas que están haciendo lo mismo.
La característica del mundo interno de otra persona es que no tiene contacto con el mundo externo. Cualquier cosa que yo hable de mí, que tiene contacto con el mundo externo, no es mi mundo interno. La característica central es que cuando yo hablo de mi mundo interno, es que estoy hablando de algo que no tiene contacto con lo externo y que solamente yo tengo contacto con eso.

Representar eso, por otro,  es ambicioso.
Estamos puestos en una posición que es la de la gestalt en que todo se centra en la superficie de contacto de un organismo ambiente, donde hay 3 puntos clave.

El organismo o el mundo interno
El ambiente o mundo externo

El yo soy es el que se conecta con el organismo y/o con el ambiente y siempre es su organismo y su ambiente. El yo tiene dos rostros, con uno yo me miro a mí mismo y con el otro los miro a ustedes y en el medio yo hago la integración.  El yo es la interacción de organismo y ambiente.
Si repasamos la influencia de Reich en la gestalt, llegamos que a fin de cuentas el yo o es un yo natural o es un yo sano o es un yo genital o es un yo parapetado que pasa a llamarse ego o yo neurótico a raíz de los vaivenes de la interacción con el ambiente. Cuando pasa a ser un yo parapetado o un ego caracterológico ocurre que el yo asume conductas con respecto a mi mundo interno que son correlativas con el mundo externo que me está presionando y del cual yo me defiendo y el organismo entonces ya tiene dos enemigos: el ambiente y el yo. En el polo opuesto puede ocurrir que el organismo se alíe con el yo y ataque al ambiente. En ambos casos ocurre un desbalance o desequilibrio. Cuando lo que el ambiente quiere con mi organismo predomina, mi yo se hace aliado del ambiente en contra del organismo, el organismo sufre el abuso. Y cuando el organismo y el yo se hacen aliados, en contra del ambiente, el ambiente sufre el abuso. La diferencia está que en este último caso, el ambiente tiene una mayor capacidad de retrucar que el organismo, y entonces el yo y el organismo pagan la cuenta. El organismo es tan potente en su interioridad que gracias al ajuste creativo busca miles de formas por las cuales finalmente encontrar su punto de ajuste y esto tiene muchas manifestaciones. Ejemplo: buscar el lugar donde uno quiere vivir, en donde el organismo y su yo quieren estar. Es un proceso básico de poder.  Es decir, el organismo y el ambiente están equilibrados,  tienen fuerzas de influencia semejantes y equivalentes o no. Si es no, en uno u otro sentido estamos mal. A fin de cuentas el poder no es algo abstracto, es el poder de ciertos organismos sobre el resto. Las decisiones las toman organismos, personas. Poder es la capacidad de influir en otro. Cuando decimos ambiente, estamos diciendo un cuerpo de organismos que influyen sobre mí, mi grupo social, familiar, personas que constituyen mi ámbito histórico cultural, incluso personas que no están vivas.

El ambiente no es el ambiente, el ambiente es MI ambiente. Aquí hay 8 ambientes (tantos como personas habemos en el salón). Nadie puede meterse en el ambiente del otro. Uno puede colegir que está compartiendo un lugar, un espacio y un tiempo en que se da mi ambiente y se da el ambiente de otro, pero no es que el ambiente sea compartido ya que el ambiente es la percepción que yo tengo y la percepción implica mi historia, de modo que no hay como. Por eso no tiene mucho sentido que cuando trabajamos con una persona que quiere hacer un trabajo con su padre, pensemos en el padre real, porque el padre real no corta ni pincha. El único padre que corta y pincha es el que la persona percibe. Todo es una relación de analogía.
En psicología hay dos palabras claves: interacción y analogía. Todo es analogía. Analogía significa que algo es igual y distinto a otra cosa, solamente tiene una relación de comparación.

En la base, la persona, el yo, vive en una situación de búsqueda de equilibrio y este equilibrio en esencia es entre su organismo y su yo y su ambiente y esto genera finalmente el creer que la vida tiene sentido.
En términos reichianos, la familia influye al organismo, esta influencia puede ser positiva o negativa y depende del organismo que es. Hay un punto de masa crítica en que finalmente la influencia es sopesada y reconocida por el organismo y la influencia genera efectos y se puede notar lo bueno y lo malo de la influencia. Esto lo vemos desde nuestro propio interés.

Hay una situación en que lo que el ambiente hace sobre el organismo tiene tal nivel de influencia que queda introyectado, que ya no deja de tener efecto, permanece en su efecto. En Gestalt, a esto se le llama introyección. En Gestalt siempre vean el tema desde el punto de vista del contacto.
 La confluencia: se percibe la confusión, algo en la superficie de contacto en la cual no se puede saber a qué lado pertenece, se sabe que pertenece a la interacción. En la vida real de la persona, hay situaciones familiares en que hay confluencia. El sujeto no sabe si lo que está interaccionando es algo que depende de él o de la familia o de una zona mezclada de ambos familia y sujeto. No es claro si es algo propio mío o es algo propio de la familia, o algo que quedó entre medio y yo no sabría distinguir cuánto de eso me pertenece a mí y cuánto a la familia o a la sociedad.  Eso quiere decir que la superficie de contacto está entre mezclada. Cuando decimos que buscamos en terapia una gestalt nítida, una de las cosas que buscamos es que la confusión disminuya, que una persona pueda tener nitidez en su zona de contacto, en su existencia, que es lo suyo y que es  del otro.

La confluencia hace que eso que confundo, a veces no sé si es algo que estoy proyectando o introyectando, que son las dos formas de punzar en el contacto, en una dirección o en otra. De la confluencia emergen dos posibilidades: algo es proyectado y/o algo es introyectado.
Cuando yo proyecto, yo le atribuyo al otro y al medio, cosas que no le pertenecen, me pertenecen a mí. Cometo dos errores: le atribuyo al otro lo que no es del otro y no me atribuyo a mí lo que es de mí.

El error en la introyección, a raíz de la confluencia, solo nace cuando yo me apropio de la introyección. Es decir, esto está confuso, me sigue punzando y viene del ambiente y no sé cómo sacármelo
Introyección significa que el yo se hace cargo de la influencia del ambiente y lo convierte en influencia propia sobre el organismo. El error es que algo que yo le debería atribuir al ambiente, me lo empiezo a atribuir a mí mismo, como yo. Ejemplo: como decía mi viejo, lo más importante en una reunión es  llegar a la hora, yo siempre llego a la hora. La influencia yo la hice propia, sea buena o no.

Una situación más, la retroflexión, algo que quisiera descargar en el ambiente, no lo hago y lo vuelco sobre mí mismo. Mi ira hacia el otro o lo otro la vuelco sobre mí mismo.
Volviendo al gestaltdrama, y en lo que respecta al grupo que va a retroalimentar a una persona, no hay nadie que esté libre de pecado. Todos al igual que el participante, tenemos nuestros propios conflictos, crisis, zonas dañadas, heridas, improntas, nuestro lado más sano y nuestro lado neurótico lo cual nos va a servir porque como se trata de empatizar con el sujeto y por analogía comprender su mundo interno, yo no tendría ninguna posibilidad de comprender el mundo interno de una persona que tiene una herida si yo no tuviera ninguna herida.

Empatizar con el dolor de una persona la  que se le ha muerto un hijo, si a mí no se me ha muerto un hijo no es lo mismo que si  a mí sí se me ha muerto un hijo... Para empatizar yo recurro a mis dolores. La empatía tiene muchos canales. Yo puedo empatizar con la ausencia, la tristeza, el desamparo. Todo el mundo de una persona es empatizable en término de que las conductas, los procesos internos que vivimos las personas son análogos. Son análogos en un sentido similar, cuando yo y tú estamos tristes, estamos en un ámbito semejante y por eso son reconocibles. También es un fenómeno cultural. Ejemplo: la ceremonia del canta-llora en Isla de Pascua.
Entonces la afirmación “ponte en los zapatos del otro” es una afirmación figurativa, ya que nadie se puede poner en los zapatos de nadie. Es mejor la frase:” él llevaba sus huellas y yo las mías y caminábamos juntos”.

Entonces, empatizar, que es un concepto clave en el trabajo, es: yo empatizo conmigo mismo, a propósito de lo que el otro vive y en la empatización conmigo mismo descubro por analogía el mundo del otro, porque lo descubro en mí y si no lo descubro en mí, no hay cómo empatizar.
Yo descubro que esto me conmueve y entonces hipotetizo que es una conmoción similar, equivalente a la que está teniendo el otro, porque yo encontré mi propia conmoción, no es que yo haya encontrado la conmoción del otro.

La clave del gestalt drama es yo empatizo, entro en mi propia profundidad y esta es semejante a la de cualquier ser humano y al estar en ese ámbito entonces se me devela el mundo interior del otro hipotéticamente.
La empatía se prueba en la acción. Yo le puedo transferir lo que empaticé al otro, la transferencia que hago es desde el lenguaje, desde la actitud corporal, y el otro asume que ha sido empatizado.

Cuando estás con una persona con la cual has tenido la misma experiencia dolorosa, tu empatizas con eso y  la clave es que emites una acción que tiene un poder de encuentro que difícilmente lo tendría si no tuvieras la misma experiencia dolorosa. La cualidad de la experiencia semejante genera la cualidad de la empatía y por lo tanto la cualidad de la acción.
De todo lo que me influye, qué es lo que yo elijo que me influya. Eso significa que va en una dirección semejante a la que voy yo. Las influencias histórico-culturales son muy fuertes.

Siguiendo con el gestaltdrama dijimos que vamos a empatizar a propósito del otro, del que hizo el trabajo en la silla caliente.  Entonces ahora cómo organizamos la información que la persona entrega y que es relevante para representar su mundo interno.
Varios acápites:

1.- Los Momentos
Cuando una persona trabaja en la silla caliente, tú puedes registrar momentos del participante y momentos del acompañante.

Los momentos del acompañante son reconocibles porque son básicamente las indicaciones o la forma cómo interacciona con el participante y generan hitos a los cuales llamaremos momentos. Algunos de esos hitos tienen inicio y termino, por ejemplo el proceso de acomodación. Es reconocible y se puede decir si hizo o no acomodación y cómo la hizo. Un segundo momento es la ampliación de consciencia. Otro momento es cuando se inicia el proceso de focusing, centrarse en la tríada sensación sentida, asidero resonancia.
El participante a propósito de estos momentos o cualquier cosa ajena a los momentos tiene sus propios hitos.

Lo que estoy proponiendo en el gestaltdrama es que el grupo sea capaz de reconocer los momentos del participante.
Al finalizar el proceso del participante tú puedes reconocer que pasó por varios momentos. Algunos son claves. Estos momentos han sido organizados por los métodos, esperando que el participante pase por esos momentos e invitando al acompañante para que genere esos momentos. Más allá de esa buena intención, los momentos del participante son sui géneris,  singulares e irrepetibles.

A veces nos damos cuenta que al inicio el participante marca un hito que va a ser fundamental en todo el proceso, por alguna declaración que hace o por algún movimiento que hace. Entonces hay que considerar dos cosas: el participante durante el proceso da cuenta de un lenguaje verbal y de un lenguaje no verbal. Y por lo tanto el trabajo del equipo es observar, reconocer y anotar el lenguaje verbal y no verbal al menos en lo que se refiere a hitos claves.
Dentro del lenguaje no verbal podemos reconocer reacciones que dan cuenta del mundo inconsciente y/o no consciente del participante. Aquí tenemos una puerta de entrada al gestaltdrama, que tiene la pretensión de representar el mundo interno del participante, que nos lleva directa o indirectamente al inconsciente del participante.
En el lenguaje verbal la persona da cuenta explícita o implícitamente de cuáles son los temas centrales, los hábitos históricos y las creencias. La retroalimentación la hace un grupo entrenado que debe detectar todo eso.

Los temas centrales, hábitos históricos y creencias es lo que aparece del mundo interno del participante.
Con el lenguaje no verbal aparecen los hábitos de proceso.  Es decir las personas nos comportamos de una determinada manera durante ese proceso.

El lenguaje no verbal puede ser consciente y no consciente. Cuando es consciente lo llamamos respuesta; cuando es inconsciente o no consciente lo llamamos reacción.
2) El empatizar.

Tenemos información para empatizar. Hay una sistematización de la pesquisa de la información.  Vamos a acceder de mejor manera al mundo interno de la persona, acceder a sus sensaciones, que implican un borde con el inconsciente, acceder a sus creencias que están detrás de sus hábitos, acceder a lo que no pasa por la consciencia de la persona y que implica un mundo desconocido para el propio sujeto pero que existe, acceder esencialmente a la forma de  la trama que tiene todo esto. Son datos que tienen un sentido para el sujeto y la clave no es comprender los datos sino es comprender el sentido de los datos, es decir la trama, es decir la estructura, la organización, la gestalt que conforman que significa estructura o configuración.
Todo lo que tomas de información y trabajas tiene sentido en la medida en que va en la dirección de generar un cambio y/o transformación que el sujeto necesita homeostáticamente.

Recuerden el flujo del proceso, en que hay un punto que se llama el punto de inflexión. Cuando tú trabajando reconoces el punto de inflexión que la persona expuso, entonces tú sabes el momento en que generó el cambio y por lo tanto sabes cómo esa persona genera cambio y eso es un aporte maravilloso en el trabajo.
En terapia, en desarrollo personal, en facilitación las personas descubrimos los puntos de inflexión de nuestro pasado. La terapia es de mayor calidad cuando podemos decir este punto de inflexión que voy a tomar hoy día van a generar esta historia en mi futuro. Esa es la verdadera consciencia, cuando yo puedo estar consciente de que mis acciones presentes van a generar una cierta tendencia. Significa que yo me hago consciente de mi presente y de mi futuro.

Con toda la información, puedes comenzar a construir el gestaltdrama en grupo. Va a ser necesario  empatizar, en el grupo debiera comenzar un diálogo respecto de lo que cada uno va descubriendo. La persona expuso todo eso y ahora vamos a ver cómo me resuena adentro y qué parte me resuenan más y cuáles menos y de qué manera, y entonces va apareciendo el sujeto interno y lo primero (eso requiere cierto acompañamiento) es empezar a despejar lo primero que surge que es el relato sobre las interacciones, o sea sobre el mundo externo del sujeto, lo que es propio de su cotidianidad que sería lo que es el psicodrama, para que empiece a surgir lo que hay detrás de esto. Surge entonces una hipótesis sobre mi mundo interno y ahí es donde yo digo que hay que darle varias veces la vuelta al perno, porque eso hay que irlo decantando y mejorando hasta que realmente aparece la configuración completa: sale a flote el submarino.
3) La representación.

Cuando la persona trabajó mostró cómo estaba el mar y si el agua estaba clara se pudo ver una imagen debajo del agua. Cuando te metes a empatizar y buscas construir lo que estaba debajo, ese es el tipo de  submarino que emerge. Y el submarino que sale a la superficie no necesariamente es el submarino del participante, pero debiera ser un submarino análogo. Primero, debiera ser un submarino, no un velero. Porque lo que el mundo que el sujeto expone es lo que viene del yo al ambiente y no estamos interesados en eso, estamos interesados en lo que está bajo la línea de flotación. La clave está en cuán análogo es el submarino que construimos. Ahora podemos representar ese submarino. En la representación entramos a los cánones del psicodrama. Hacemos la representación y el sujeto puede hacer las modificaciones que le parezcan y las modificaciones que vienen de su consciencia pero pueden ser sumamente válidas porque son las suyas y finalmente el participante ingresa a representar parte del submarino y ahí tiene una muy buena ocasión para hacer consciente lo que estaba inconsciente. Lo que está en el mundo interno nuestro no todo es inconsciente. Llamémosle al mundo interno mi sí mismo. Yo tengo un permanente diálogo con mi sí mismo, el cual tiene zonas que son muy conscientes y van acompañadas de sensaciones, sentimientos, emociones que son internas. Mi sí mismo incluye aspectos inconscientes que los he puesto en una sombra o en una zona de no reconocimiento o de rechazo o incluso he intentado sacarlos de mi sí mismo y fragmentarlos y dejarlos como entidades autónomas que están dentro de mí pero que yo no considero. Posiblemente la consciencia de todos estos aspectos tengan un efecto positivo y es que yo acepte de mejor manera mi sí mismo y defragmente o sea reúna las piezas sueltas y descubra que ese soy yo, ahí estoy completo. Cuando estoy completo, posiblemente tenga más energía, fuerza, voluntad, temperatura.
Hasta aquí por ahora.